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oOElinaBaroneOo



Al llegar al que consideraba mi hogar, el de mis padres….en donde al llegar a la puerta, saco la llave de mi bolsillo y la meto en la cerradura al girarla encuentro que habían cambiado la cerradura, me dirigí hacia a la parte trasera de la casa buscando la cocina, al dar con ella  logre entrar por la puerta de la cocina, teniendo suerte de que no cambiaron la cerradura, subí corriendo las escaleras de mármol, colocando mi mano sobre el barandal dorado, a cada paso que daba, abrí la puerta blanca de mi habitación y la cerré…. Encerrándome en la que antiguamente era mi habitación llore hasta zacear ese coraje, esa furia ese sentimiento que oprimía mi pecho, y me hacía sentir impotencia, me quede dormida al poco tiempo…después de un rato comencé abrir los parpados muy lentamente, al tenerlos abiertos por completo, mis ojos, con el reflejo de la luz de la luna  en la pared de mi habitación veían la sombra de un hombre, imaginaba que era él…cerré mis ojos, continúe durmiendo.  La mañana siguiente al despertarme  busque en mi guardarropa un hermoso traje  blanco,  tipo corsé arriba con un  diseño único de la época, el faldón era de encaje en la orilla con telas finas traídas de España, me coloque una zapatillas blancas que lucieran a la par con mi vestido, me puse las joyas de la familia, y camine a prisa hacia las escaleras mientras bajaba lentamente sentí un aroma delicioso, exquisito, supuse que venía de la cocina dirigiéndome hacia ahí cuando escuche la voz de mi padre.

Padre: Elí ven acá, ¿qué es lo que haces en esta casa?, tú ya no vives aquí, te quiero fuera. Si tuviste un problema con Lucian arréglalo pero ya...*miraba a mi padre con desprecio y coraje*
Nunca olvidare esas palabras, *mientras le veía a los ojos fijamente sin parpadear, subiendo una mano a mi cintura y con la otra jugueteando mi cabello, pensaba* (ese hombre no parece un padre)…le comente todo lo ocurrido con mi esposo y aun así me negó hospitalidad en la que un día fue mi casa, mi hogar, y la que sería mi patrimonio en dado caso de un divorcio,… me decía tantas cosas…. Que era mala hija, que había preferido a ese hombre, que las cosas ya no serian como antes, que jamás me permitiría regresar,* acomodándome el vestido, susurré en voz baja* ya veremos si no regreso…. que soy un insulto para la familia, que seguramente  le había dado motivos a Lucian para su traición, que no era suficiente mujer, *le grite en ese momento, sin importarme que le merecía respeto por el simple hecho de que era mi padre* tú no sabes lo que es una mujer…..*el prosiguió en sus insinuaciones sin impórtale mi comentario* ….que lo más seguro que solo me utilizaba para pasar el rato, que jamás imagino que yo aceptara a alguien sin la autorización de ellos, por lo tanto ese era problema mío y no de mi familia ….Me hizo sentir incomoda, poca cosa, una mujer cualquiera, una vendida….enfurecí, después de la bofetada que me dio y recordé todo lo que Lucian emanaba de sexualidad y magnetismo hacia esa mujer mientras imaginaba el ver a mi esposo en la cama con aquella otra mujer, sentía impotencia por haber salido con desesperación del lugar y no hacerle sentir a ambos que conmigo si se jugaba habría consecuencias….sentía rabia coraje y frustración de que mi padre no me apoyara en tan dolorosa situación, en ese momento me llegaron a la cabeza todos los pensamientos, como un simple ser humano sabia demostrar en estas situaciones que es una bazofia, un desecho de la naturaleza y no valorar lo que es un hija, pensé uno menos es como darle al mundo un regalo,  tome el jarrón de cristal cortado con rosas rojas que se encontraba encima de la chimenea y lo lance con toda mi fuerza sobre la cabeza del que se decía ser  mi padre, esa inmundicia , una escoria más de la humanidad, cayó en el piso de la sala, justo a mis pies, lo miraba con altanería y me sentí una Diosa en ese instante, soy una Diosa. Veía su cabeza abierta sangrando, su cuerpo temblando y yo disfrutando a su lado, mirando fríamente, observaba gozosa de cómo brotaba la sangre de su cabeza, de cómo chorreaba en forma de rio la sangre por todo su cuello lentamente recorriendo cada parte de sus poros, salía coágulos de sangre que le había formado por el golpe, su mirada era de misericordia, de piedad, sabía que si pudiese hablar me suplicaría ayuda, por lo que decidí tomar un trozo de vidrio del jarrón, lo apreté con fuerza con la mano y me incline hacia el rasgándole la piel degollándole el cuello  fue el momento más glorioso que tuve ese día, aunque sin saberlo mi tarde y noche harían un día perfecto.
Espere a que llegaran mis hermano a la casa, mientras me senté en la terraza a leer un libro se presentaron al caer el atardecer,  para ese entonces había limpiado la sala y enterrado el cuerpo de mi padre en el patio a lado de las letrinas, en donde habéis dejado una rosa que tome de aquel jarrón. El paisaje para mí era tan confortable encajonaba perfecto con un silencio de muerte, les dije a mis hermanos que quería platicar con ellos que nos reuniéramos en el jardín, yo llevaría el té…. Le había puesto veneno para rata y un poco de amonio que había conseguido en la botica, se los serví con toda amabilidad, mientras les platicaba el por qué de mi regreso a casa, y lo que haría con la casa que sería mi herencia si mi padre muriera, los vi agobiados por el simple hecho de haber escuchado que me quedaría con todo, caminaba pavoneándome de lado a lado mientras sacaba mi labial del bolsillo, con una mirada coqueta me mire en espejo pequeño que se encontraba en la pared de la terraza… de pronto comenzaron a sacar espuma de sus bocas, pedían mi  ayuda con gestos, guarde mi labial, con toda tranquilidad  tome asiento en una de las sillas que estaban a lado de ellos , con una sonrisa en mi rostro veía  fijamente a cada uno de ellos, gozando como se retorcían del dolor. Tome a ambos de sus cabelleras  e inclinándome un poco les dije: es lo menos que meren deberían agradecerme. Me levante  de golpe les solté y mirándolos  por encima de mi hombro con desprecio, desaire, repulsión pensaba… mi próxima víctima seria mi madre….me dije a mi misma: La vida es decepcionante , espere al anochecer que era la hora en la que ella acostumbraba a bajar de su dormitorio mientras mi padre no estaba , decidí que sería más rápida su muerte, sentí aborrecimiento de ella repulsión, venia hacia mi bajando de las escaleras con una hermosa sonrisa, la cual solo deseaba borrar de ese rostro, tome su mano cuando llego a mí, desprevenida ella aproveche y la jale bruscamente hacia mi pecho y le golpee las rodillas con mi pierna derecha obligándola a caer hincada enfrente de mi….le voltee el rostro hacia atrás y con  desprecio mientras tomaba su cuello con mis manos y le miraba fijamente a los ojos con odio, ella me miraba con dulzura pero eso no me hizo cesar de mis deseos por acabar con su vida por liberarla de ser un simple humano tan insignificante y estorboso. Su cadáver yacía en mis pies, le deje a lado de su cuerpo una hermosa rosa, lo tome como una marca personal. Justo así fue…..tan fría como la noche y tan cálida como el placer de tener un desahogo de libertad….Por primera vez saboree el poder de dar muerte a un ser vivo, de sentir el dulce aroma y amargo sabor de la sangre, fue un día perfecto. Pude haberlo hecho mejor, pero era tomarme demasiadas molestias para tan simples seres. Lo que No pude es luchar contra el destino, desordenada e inconsciente de lo que había hecho, las muertes recientes no me producían nostalgia, tan solo impaciencia pro iniciar un nueva vida, al marcharme de esa casa, me dije a mi misma para que darme la molestia de enterrar al resto empaque mis cosas, rápidamente me mí un cambio de ropa y me dirigí a Londres. Todos los derechos reservados.©

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